BIOGRAFÍA

El escultor Mario Antonio Ros Lopez

Mario Antonio Ros López nace en Murcia, en el año                1 898. Sus padres eran agricultores, ayudándoles en las faenas agrícolas. Pero muy pronto despertó en él su vocación por la escultura. Así de niño arrancaba arcilla en los bancales y modelaba con el barro pequeñas figuras con sus manos. A l pasar un día el poeta, escritor y cantor de la Vega don Pedro Jara Carrillo quedó entusiasmado de ver al joven Mario la destreza que poseía en el modelado en el barro, y le aconsejo con permiso de sus padres que lo enviara a las clases de dibujo que impartía el profesor y notable pintor costumbrista y de paisajes, don Pedro Sánchez Picazo, en la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Murcia. Aquí Ros tuvo su primera formación artística.
Más tarde, en la década de los años veinte es becado por la Excma. Diputación Provincial de Murcia, cursando estudios en Italia (Roma, Florencia, etc.), París y Madrid. De ese momento de pensionado es su magnífica obra titulada: «La Segadora», soberbio desnudo femenino en actitud reclinada. En Madrid, asiste como alumno en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, siendo discípulo de Mariano Benlliure e Ignacio Pinazo. Colaboró con Benlliure en el modelado del caballo del rey Alfonso XII en el Parque del Retiro de Madrid.
En la capital del reino, contaba con la ayuda y amistad de dos excelentes artistas, el notable escultor cordobés Mateo lnurria y el famoso pintor Salvador Dalí.
Un día, paseando lnurria y nuestro escultor, se dirigían al estudio de Dalí en Madrid, para contemplar sus obras, momentos antes de entrar se produjo un atentado anarquista, con bomba, al no estar Dali, tuvieron la suerte de salvarse.
En Madrid, residía en la calle María de Guzmán nº31, cerca de los Nuevos Misterios. Allí le sorprendió la guerra civil, dejando tras de sí, su estudio los moldes y su obra, para regresar urgentemente a Murcia, en el año 1937.
Terminada la guerra, tiene problemas económicos y se dedica a la representación de productos de comestibles. En 1939, lleva a cabo una contrata de su suministros en las prisiones que entonces se encontraban en iglesias como las Agustinas y San Juan Bautista.
El ministro lbañez Martín, le propone en 1943, que marche a Madrid con Planes, pero le dice que ya está afincado en Murcia, con su mujer e hijos y que le resultaría muy difícil establecerse en la capital de España.
En Murcia en la década de los cuarenta asiste a exposiciones locales y regionales, como la celebrada en el año 1943 en el Casino.
La iglesia parroquial de San Nicolás le encarga su titular que expone en la confitería Ruiz Funes, con la terrible desgracia que cuatro focos de luz derrirten la policromía de la imagen estropeándola.
A mediados de los cuarenta, el obispado le encarga los cuatro Santos de Cartagena: San Fulgencio, San Leandro, San Isidoro y Santa Florentina, realiza los moldes, y termina los bocetos que son aprobados, y solamente queda terminada en escayola Santa Florentina.
A partir de la década de los cincuenta en adelante, hasta su muerte acaecida en el año 1975, se dedica a bustos de personajes conocidos e importantes de Murcia, como el del famoso médico don Raimundo Muñoz y a encargos de particulares.

Escultores Murcianos del siglo XX- José Luis Melendreras Gimeno